NOTA DE PRENSA
Desde Autismo Madrid se subraya la importancia de garantizar el ratio de 5 alumnos por aula de apoyo, así como otras medidas que aseguren el respeto de los derechos de este alumnado y la igualdad de oportunidades con sus compañeros.
Desde hace años, la Federación Autismo Madrid viene solicitando la existencia de una normativa que regule el funcionamiento de las Aulas de Apoyo de los Centros de Escolarización preferente para alumnado con TGD/TEA (Trastorno del Espectro del Autismo) de la Comunidad de Madrid. Aulas que llevan en funcionamiento desde 2001 y que casi quince años más tarde siguen funcionando como un “proyecto piloto”.
La no existencia de una normativa que establezca las bases de funcionamiento, organización y estructuración de esta modalidad educativa ha dado origen, entre otras muchas consecuencias negativas, a la situación que ya desde hace tiempo venimos reivindicando: el aumento de la ratio de las aulas de apoyo a este alumnado.
Este tipo de aulas deben ofrecer al alumnado con TEA una educación ajustada a sus necesidades, buscando su máximo desarrollo académico y respetando los principios de igualdad de oportunidades y de atención a la diversidad. Para ello estas aulas cuentan con unas determinadas características de estructuración y funcionamiento, sin las cuales su eficacia queda anulada.
LA RATIO EN LAS AULAS DE APOYO
Una de estas características es que estas aulas deben contar con un máximo de cinco alumnos, y dos profesionales al frente. Así está establecido en varias referencias legislativas, en citas bibliográficas especializadas y en diversos documentos, como el documento marco para la puesta en marcha de los Centros de Escolarización preferente de alumnado con TEA, de la propia Consejería de Educación; o diversas guías técnicas existentes sobre la materia, y las recomendaciones y exigencias de las entidades del sector, como es Autismo Madrid. Y algo muy importante: la propia presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, hizo suyo ese compromiso en su investidura.
CONSECUENCIAS DE UNA RATIO SUPERIOR
Basándonos en todo ello, se considera que el aumento de ratio en las aulas de apoyo, pasando de cinco alumnos a siete u ocho como está sucediendo, implica directamente lo siguiente:
- Incumple el derecho a una educación de calidad de estos alumnos.
- Atenta contra los principios de atención a la diversidad e igualdad de oportunidades.
- No cubre las necesidades educativas de los alumnos y alumnas con TEA.
- No cubre los apoyos intensivos y especializados que este tipo de alumnado requiere.
- Disminuye las oportunidades efectivas de aprendizaje de los alumnos con TEA.
- No permite una atención individualizada del alumnado con TEA.
- No favorece su participación en el proceso de enseñanza – aprendizaje.
- No permite la adecuada organización y estructuración del aula, la adaptación de los materiales, de las tareas y de los sistemas de evaluación.
- No permite un adecuado seguimiento del proceso de aprendizaje del alumno.
- Dificulta la efectiva organización de los apoyos.
- Genera mayor estrés en el alumno con TEA y una mayor sensación de “no control” sobre el entorno.
- Sobrecarga el trabajo de los profesionales del aula de apoyo.
- Implica desgaste de las familias y una inadecuada intervención con estas.
- Aumenta los casos de acoso escolar y dificulta su prevención.
REQUISITOS INDISPENSABLES EN LAS AULAS DE APOYO A ALUMNADO CON TEA
Los requisitos mínimos que se deben respetar para que esta organización, estructura y funcionamiento sean eficaces, y que pedimos sean tenidos en cuenta con urgencia, son:
- Una ratio máxima de cinco alumnos con TEA por aula de apoyo con la presencia de los profesionales cualificados y estables necesarios: un Profesor/a de Pedagogía Terapéutica o Audición y Lenguaje y un/a Técnico Superior en Integración Social.
- Recursos materiales y espaciales: un aula con la estructuración y adaptación necesaria. El centro educativo en su totalidad debe estar adaptado a las necesidades de este alumnado.
- Mecanismos efectivos de coordinación entre los profesionales, así como entre los profesionales y las familias.
- Seguimientos oportunos del Equipo Específico de Alteraciones Graves del Desarrollo.
UNA RESPONSABILIDAD DE LA COMUNIDAD DE MADRID. UN COMPROMISO A CUMPLIR
Las familias del alumnado de los Centros Preferentes están seriamente preocupadas y piden una rápida intervención. Esta preocupación es la misma que anima el trabajo que desde Autismo Madrid se está llevando a cabo, y siempre defenderemos esas demandas porque es la razón de ser de una Federación que se posiciona junto a las familias y a las personas con TEA en la defensa de sus derechos más fundamentales.
Celebramos la buena aceptación de la Consejería de Educación, Juventud y Deporte de estas demandas en el encuentro que ya hemos mantenido, y la puesta en marcha de algunas medidas para tratar de paliar el problema. Medidas que no obstante aún son insuficientes para una justa igualdad de oportunidades y una educación de calidad del alumnado con TEA. Debemos seguir avanzando hasta que todo lo anteriormente expuesto esté garantizado y se dote de los recursos necesarios para ello.
Estamos dispuestos a seguir colaborando con la Consejería para que estas necesidades se cubran a la mayor brevedad.