Con estos diez puntos, divididos en dos partes, pretendemos hacer hicapié y aclarar diez de los mitos más difundidos sobre el mundo del autismo así como acercar la verdadera realidad y condición de estas personas tan maravillosas. Una información que consideramos de gran interés y utilidad.
1. A las personas con Autismo les gusta estar solas: lejos de esa idea, las personas con TEA no son personas aisladas, indiferentes o “desconectadas” que viven al margen de los demás y sin interés alguno por relacionarse. Muy al el contrario, son personas que se esfuerzan a diario en ello y que, por sus características y condición, presentan dificultades para conseguir “conectarse”, y hablamos de dificultades, no de incapacidad. El mundo de las personas con Autismo no es un mundo cerrado y solitario, sino abierto y más cercano de lo que creemos y, como nosotros sí tenemos la capacidad, en nuestra mano está la posibilidad de abrirles la puerta.
2. Las personas con Autismo no tienen sentimientos: todos somos iguales, por lo que las personas con Autismo sienten como todos nosotros, incluso muchos de ellos tienen hipersensibilidad, es decir, que ante determinados estímulos (ruido, luz, texturas, temperaturas, colores, olores, etc.) son mucho más sensibles que nosotros. Lo que les sucede en realidad es que no pueden procesar de manera funcional toda la información que les llega, incluida la emocional, por lo que algunas de las estrategias de afrontamiento que utilizan son refugiarse en ellos mismos y/o realizar actividades conocidas y controlables para ellos y/o canalizar sus emociones a través de rabietas y berrinches; Por otro lado, las personas con TEA también presentan dificultades para comprender los estados mentales y sentimientos del otro, así como poner nombre y expresar los suyos propios. A todo ello les tenemos que enseñar.
3. Las personas con Autismo no se comunican ni se relacionan: Las investigaciones sobre desarrollo evolutivo apuntan que una persona cualquiera que no haya alcanzado el uso del lenguaje oral antes de los 6-7 años de edad, es probable que ya no lo desarrolle. Por otro lado, también es cierto que todas las personas con TEA presentan dificultades de comunicación y que existe aproximadamente un 25% que no alcanza el uso de la palabra hablada, pero esto no significa que sean incapaces de comunicase y de relacionarse, pues la realidad demuestra que sí lo son, y para ello pueden utilizar sistemas alternativos y aumentativos de comunicación como pictogramas, agendas, lengua de signos, comunicadores digitales, etc. con los que expresan necesidades, deseos, emociones… y con los que también son capaces de comprender y de compartir mejor el mundo que les rodea.
4. Las personas con Autismo presentan discapacidad intelectual asociada: el Autismo no implica necesariamente la existencia de discapacidad intelectual, fijémonos por ejemplo en las personas con Asperger. Y, aunque sí es cierto que existe un porcentaje de personas con TEA que sí la presentan, los estudios y las investigaciones no dejan claro el porcentaje. Por otro lado, es necesario mencionar dos aspectos: que muchas personas con discapacidad intelectual severa presentan signos de Autismo y que en la actualidad aún no existe un sistema de evaluación de la inteligencia específico para las personas con TGD.
5. Las personas con Autismo tienen habilidades especiales: al igual que todas las personas, las que tienen Autismo también presentan fortalezas. En este sentido, las investigaciones concluyen que una minoría, aproximadamente un 10% de las personas con TEA, presentan habilidades especiales, sobresaliendo en tareas de tipo matemático, artístico, musical, memorístico, etc. No obstante es importante aclarar que estas habilidades de “sabio” no son específicas del Autismo si no que también aparecen en otros cuadros diagnósticos.
Laura Hijosa Torices
Psicóloga
Federación Autismo Madrid
Estoy de acuerdo en todo ,
Estoy muy de acuerdo.