Fuente: Antena3Noticias

Nicole Duggan es una joven madre irlandesa. Tras observar el comportamiento de los padres de otros niños con su hijo, publicó en facebook una petición.

Riley, un niño de tres años con autismo, se ha convertido involuntariamente en el centro de una historia de discriminación. Su madre se ha visto en la obligación de escribir un texto en Facebook para señalar algo obvio: su hijo es igual a los demás niños.

«Llevo un tiempo queriendo escribir esto y nunca me he atrevido, pero al final he decidido que 2017 es el año en el que podemos marcar la diferencia y tratar de quitarnos los miedos», explica Duggan. «Siempre observo que los padres tienen un problema. He estado en situaciones en las que los padres han apartado a los niños de mi hijo en parques, lo que es muy doloroso para mí. Al menos Riley no se da cuenta de eso«, continua «Los niños nunca le tratan de manera diferente.  A ellos les encanta jugar igual que a él, y es todo lo que les importa»

Con esta actitud, los padres están creando a los matones del futuro.

«Mi niño es como el vuestro, le encanta bailar, recibir mimos, llora cuando se cae y adora a Mickey Mouse», sin embargo, apunta a que hay algo especial en él, porque debido a su trastorno percibe el mundo de manera diferente. «Las pequeñas cosas que nosotros aceptamos en nuestro día a día son las más difíciles para él. Luces, sonidos, olores …», explica su madre. «Las ‘cosas normales’ como hacer la compra, jugar con niños o cortarse el pelo puede resultar inaguantable para él».

La publicación de este texto ha generado una corriente de simpatías, que ha hecho que se convierta en viral. Nicole ha explicado que solo está haciendo lo que el resto de padres de niños con autismo hacen: pedir aceptación.