El texto lo ha compartido Menchu Gallego en su blog «mi príncipe y nuestro reino azul»
Hoy, de nuevo, queremos compartir el texto de una madre en que se vuelve a demostrar que las madres y los padres son campeones en hacer lo imposible para proteger a sus hijos y hacerlos llegar lo más lejos posible… Y más aun cuando un hijo nace con un ala rota, o dificultad para volar.
Quizá much@s madres y padres se sientan reflejados. Gracias a Menchu Gallego por compartirlo y Gracias a l@s padres/madres valientes que no se rinden.
El texto dice así:
No sé si lo sabes, creo que sí, pero nos haces suspirar a todos los que te queremos.
Nos haces llenar los pulmones de ese aire limpio, sin la más mínima partícula de nada que no sea respirable.
No hace falta mucho para que nos derritamos por ti, sólo una mirada, una sonrisa, una caricia, sólo tu estar, tu presencia con ese halo que te envuelve, con esa energía que desprendes.
Quizá haya personas que crean que eres afortunado porque estás rodeado de amor, de admiración, de ternura, de cuidados, pero realmente eres tú nuestra fortuna, tú quien haces que un escalofrío recorra nuestro cuerpo cuando nos llamas, cuando nos sonríes, cuando nos miras. Cuando te diriges a cada uno de nosotros para pedirnos lo que sabes que no te negaremos: Besos, cosquillas, pan con kepchup, jajajaja… eres un granuja y eso si lo sabes…
Me haces feliz, enormemente feliz. No importa lo que a veces nos cueste terminar los días, algunos eternos, y eso no significa que sean malos. No importan los momentos duros, no importan los nuevos retos, los fracasos, las caídas, los obstáculos… porque eso también es vida, mi niño amor, y vivir es lo importante.
Esa lección me la diste tú, me la das cada día en el que te veo en esa intensidad que tienes, con esa gran facilidad para exprimir al máximo el jugo a todo lo que vives. No te distraes con minucias, si lloras, LLORAS, si ríes, RÍES, si comes, COMES, si juegas, JUEGAS, si te enfadas, TE ENFADAS, si disfrutas, DISFRUTAS,… todo a lo grande, como ese corazón que tienes…
Eres mi niño amor, eres el niño amor de todos los que te queremos, y mis ojos se llenan de agua por saberlo.
No eres perfecto mi vida, eres mucho más que eso, eres la perfecta imperfección, y en este mundo de imperfectos, no todos pueden decir lo mismo.
Quiero que siempre sigas siendo así, no dejaré que nadie pretenda si quiera cambiarte. Tienes muchas cosas que aprender y lo harás, pero son muchas más las cosas que tienes que enseñarnos…
Te quiero hasta el infinito y más allá… mi niño amor…