«Bebé Miradas», es el nombre que se ha dado a un proyecto piloto que persigue la detección precoz de Trastornos del Espectro del Autismo (TEA).
«Bebé Miradas»ha sido puesto en marcha por parte de la Asociación Autismo Burgos y dará sus primeros pasos con varios ensayos de prueba antes de comenzar a trabajar con los grupos de estudio previamente seleccionados, según ha explicado Javier Arnaiz, director técnico de Autismo Burgos.
Se llevará a cabo en el Hospital Universitario de Burgos, dentro de la La Unidad de Investigación y consiste en la observación de la fijación de la mirada (eye-tracking) y la recogida de los datos resultantes en niños de 2 meses a 3 años con tres perfiles muy definidos: Niños con alto riesgo de TEA por contar con antecedentes familiares, niños con alto riesgo de trastornos del desarrollo por incidentes durante el embarazo y un tercer grupo sin riesgo asociado.
Esta investigación se basa en estudios que demuestran que los niños diagnosticados de autismo presentan en los primeros años de su vida indicios, síntomas de alerta,que tienen que ver con la fijación ocular.
A partir de los dos meses de edad, el niño comprende que la mirada es un instrumento de comunicación y mira a su interlocutor, pero los niños con autismo a partir de los 9 meses dejan de hacerlo.
Se van a hacer las pruebas con niños a partir de los dos meses, porque aunque un diagnóstico certero no se lleva a cabo hasta más adelante (entre los 18 y 24 meses), si se detecta algún indicio se podrá iniciar una intervención temprana con efectos muy positivos en caso de confirmarse el diagnóstico.
El proyecto cuenta con una ayuda de 100.000 euros del Ministerio de Sanidad, derivada de las aportaciones del IRPF, y colaboraciones económicas de empresas y entidades burgalesas.
Felicidades a la Asociación Autismo Burgos por esta iniciativa, y mucha suerte en vuestro estudio!