Un compañero robótico puede ayudar a niños con autismo a aprender y desarrollar habilidades comunicativas, aseguran los maestros de una escuela para niños con necesidades especiales del sur de Inglaterra.
Ingenieros de la Universidad de Hertfordshire crearon un increíble robot capaz de emitir gestos y frases simples y repetitivas. De esta manera, ayudan a los niños que sufren de autismo a comunicarse y le dan herramientas para hacerlo.
Los primeros Kaspars salieron en Inglaterra y, según los integrantes de centros para chicos con autismo y sus profesores, se notan grandes mejorías en los niños.
Ya ha sido utilizado en Tracks, una guardería especial para niños con autismo de 2 a 6 años, y ha permitido mejoras en el proceso comunicativo de los pequeños desde que interactúan con el robot, cuenta BBC Mundo.
En un vídeo del mismo medio se ve a Kaspar, que tiene siempre la misma expresión y el mismo sonido, lo que lo hace más atractivo a los niños que asisten a la escuela del sur de Inglaterra.
Los niños participan con él en escenarios de juego que se desarrollan de acuerdo con los objetivos terapeúticos o de desarrollo que son relevantes para cada niño en particular, indica por su parte la página de la Universidad de Hertfordshire.
Para el tratamiento de niños con este trastorno ya se han implementado otros tipos de robots, como ‘Rene‘, diseñado por un grupo de investigadores de la Universidad de Zagreb, en Croacia.