A ti, mamá o papá, te asusta tanto su futuro. Todos los días te asaltan las mismas preguntas ¿podrá valerse por sí mismo?, ¿tendrá un trabajo?, ¿se enamorará de alguien? Rompen los mejores momentos, inoportunas, incansables. El miedo a la respuesta, a veces, te ha hecho llorar. Otras muchas te hace luchar.
Luchas, tan incansable como ellas, por que aprenda todo lo que un niño debe aprender; luchas por que aprenda a atarse sólo los cordones, por que salude a las personas cuando entra en un lugar, por que sepa manejar el dinero, por que pueda coger sólo el autobús. Cuantos más logros conseguís más ganas tenéis de luchar; la meta está cada vez más cerca.
Luchas tanto que en más de una ocasión no has conseguido el tiempo suficiente para disfrutar de las cosas que sólo él puede darte; de lo que sólo él puede enseñarte. Recuerdas aquella vez que no pudiste disfrutar de su curiosa manera de jugar alineando objetos porque estabas enseñándole el juego simbólico. No pudiste disfrutar de su explicación sobre la evolución del ser humano porque estabas luchando porque se interesara por el temario de clase. No pudiste disfrutar del sistema de acantilado de la ciudad que él mismo había deducido porque estabas luchando porque aprendiese a ir a la panadería sin ti. Tampoco pudiste darte cuenta de que había memorizado el recorrido de todas las líneas de autobús porque luchabas para que saludara al conductor.
Lucha, sigue luchando por él como sólo tú sabes hacerlo porque tu lucha incansable será la que le sitúe en el lugar adecuado, la que le permita tener su oportunidad. Pero mientras luchas sonríe, sonríe y disfruta el momento; alguien verá un día su persistencia, su tenacidad, su impresionante memoria, su original forma de pensar, su trabajo metódico y otras tantas cosas que tú bien sabes y que lo hacen tan especial ante los demás.
Tú le diste la oportunidad y fuiste testigo de cómo supo convertir sus debilidades en importantes fortalezas. Tú lo hiciste volar hasta las flores y él se convirtió en la mariposa que deslumbró a todas ellas.

  • Título: «Vuelo de una mariposa»
  • Autora: Sonia de San Lázaro Lorente
Share This
Ir al contenido