por Federación Autismo Madrid | Sep 5, 2016 | Concursos
Era otro de mis días azules, con una tristeza senil alojada en la boca del estómago. Tenía esa rabia y esa impotencia de salir corriendo y pegar un alarido en plena avenida… El pito de los carros y el perro pirata del vecino conspiraron para crear un suspiro...