Muchas de las personas con TEA tienen dificultades para procesar la información sensorial del entorno, en algunos casos existe una hiperresponsividad sensorial, es decir, ante un estímulo como, luces, sonidos, sabores, texturas y  olores se responde de manera sobredimensionada.

Redactado por Ahinara Burén

La persona con TEA puede percibir los estímulos de manera exacerbada, provocando una gran molestia, llegando incluso a sentir dolor, ansiedad y en algunos casos, desajustes conductuales.

Por ello, es importante tener en cuenta esto para facilitar el apoyo necesario y poder ayudar así, a la persona con TEA a abordar las posibles dificultades sensoriales que se presenten en su día a día.

Os facilitamos unos vídeos que intenta recrear, de manera aproximada, la percepción de diferentes situaciones de la vida diaria desde la perspectiva de la persona con TEA.

El primero de ellos, se centra en la información sensorial acústica, ofreciéndonos un ejemplo de cómo puede afectar el sonido a una persona con TEA.

Por otra parte, los dos últimos vídeos nos muestran posibles dificultades sensoriales con que se puede encontrar una persona con TEA en un contexto social abierto y cómo pueden reaccionar a las mismas, dándonos pistas también a nosotros de cómo actuar ante estas situaciones de modo que sean más ajustadas para todos.